• La Policía Nacional desmantela una organización criminal que operaba en una habitación subterránea ubicada tras una doble pared falsa de la vivienda de uno de los investigados
• Los agentes incautan una prensa hidráulica y una envasadora al vacío de características industriales junto a gran cantidad de productos químicos para fabricar sustancias estupefacientes

Agentes de la Policía Nacional han desmantelado un laboratorio de fabricación de sustancias estupefacientes y ha detenido a los 10 miembros que componían una presunta organización criminal dedicada a la fabricación y posterior distribución, a mediana y gran escala, por toda la costa mediterránea de diferentes sustancias estupefacientes.

La investigación comenzó en mayo, cuando la Policía detectó la existencia de esta trama, que actuaba en un laboratorio oculto en una vivienda de Teulada Moraira, por lo que se inició una investigación que se llevo a cabo en dos fases.

Primera fase: una bombona de butano para ocultar la droga

En una primera fase, los agentes, lograron identificar a siete personas relacionadas con el entramado, sobre quienes se dispuso un operativo de vigilancias y seguimientos discretos para establecer sus nexos de unión con otras redes, así como para ubicar sus domicilios y posibles lugares de almacenaje de las sustancias con las que traficaban.

Los agentes, durante una de las vigilancias, consiguieron averiguar uno de los medios de ocultación de la droga utilizados por el entramado; una bombona de butano manipulada, en cuyo interior trasladaban la droga de un lugar a otro y que llegó a ser transportada del domicilio de uno de los principales investigados a otro lugar por otro de los detenidos en su vehículo.

Los investigados guardaban fuertes medidas de seguridad cuando se desplazaban de un lugar a otro, realizando maniobras de conducción orientadas a detectar un posible seguimiento policial. De hecho, se llegó a observar cómo alguno de los acusados realizaba contravigilancias en el entorno de la vivienda del principal investigado con el fin de detectar una posible presencia policial. Las medidas de seguridad adoptadas por los miembros de la organización requirieron de la colaboración de efectivos de la Policía Nacional de otras provincias para evitar ser detectados durante sus vigilancias.

Durante la investigación, los agentes detectaron indicios suficientes para llevar a cabo la fase de explotación, consiguiendo así la detención de siete de los implicados y, tras el registro de cuatro viviendas, se logró la incautación de diversa y variada cantidad de droga: cocaína, cocaína rosa, denominada “tusi”, cristal y otras más, además de 35.135 euros en efectivo.

Segunda fase: Un laboratorio y una prensa industrial ocultos en un subterráneo

Después se consiguió localizar el lugar donde se producía la droga que posteriormente distribuían, y que se encontraba en una vivienda ubicada en Teulada Moraira que supuestamente regentaba un varón de nacionalidad belga, a quien también se venía investigando, junto con otro individuo de nacionalidad española afincado en Benidorm.

Ante la posibilidad de que pudieran evadirse de la acción policial, los agentes realizaron un operativo en el que interceptaron y detuvieron a uno de estos investigados cuando se disponía a abandonar su vivienda en compañía de su mujer y a otro varón, a bordo de su vehículo.

La hipótesis policial sobre un posible laboratorio oculto se confirmó durante el registro de la vivienda de Teulada. Los agentes descubrieron una habitación escondida tras una doble pared en el subterráneo del domicilio y en cuyo interior se encontraba el laboratorio de elaboración de sustancias estupefacientes, que estaría destinado principalmente a la fabricación de drogas de diseño, como speed, cristal o éxtasis.

Entre los útiles hallados en el laboratorio clandestino durante el registro se detectó una prensa hidráulica y una envasadora al vacío de características industriales, con las que culminaba el proceso de manipulación de las drogas fabricadas.

El ingenio de las caletas

El laboratorio contaba con todo tipo de útiles de precisión destinados a la elaboración de drogas de diseño, incluida una gran cantidad de productos químicos y precursores necesarios para su fabricación, así como objetos deliberadamente modificados a modo de “caletas”: se trata de objetos para esconder la droga con el fin de no ser detectada y son menos voluminosos que la bombona de butano hallada con anterioridad.

En cuanto a las sustancias estupefacientes incautadas durante las dos fases de la operación, se intervinieron las siguientes sustancias: 358 gramos de droga “tusi” (metanfetamina), 223,78 gramos de cocaína, 294 gramos de “cristal” (metanfetamina), 5,85 gramos de speed, 35,75 gramos de metanfetamina, además de 3.199 gramos de marihuana y 229 de hachís.

Los investigadores localizaron además 24 kilos de una sustancia en polvo. A los arrestados se les considera presuntos responsables de los delitos contra la salud pública y pertenencia a organización criminal.