OPINIÓN

JUAN LUIS NADAL. Indígena local y miembro de Acció Ecologista Agró

• «Joan es un magnífico árbol protegido en suelo público del Vessanes y no solo no se ha implementado ninguna acción que mejore sus condiciones si no que se está poniendo en serio peligro su vida
• Si eso ocurre a la vista de todo el mundo y con el beneplácito de las autoridades..¿qué podemos esperar que le suceda al ficus de la Mistelera o al algarrobo de la Venta de la Posa?

A la izquierda, Joan en el momento de ser protegido. A la derecha como epicentro de un evento educativo.                                                                                                                          

“La mujer de Cesar no solo debe ser honrada; además debe parecerlo”

Puede que “aparentar” sea un fenómeno asociado a los tiempos que vivimos actualmente, pero como bien apuntaba el general romano Julio Cesar hace 2000 años, el “postureo” ya era entonces una herramienta de estatus y poder a tener en cuenta.

Y si ofrecer una imagen falsa o distorsionada de lo que somos está a la orden del día en el ámbito de lo social, casi podríamos concluir que donde este recurso está claramente institucionalizado es en aquellas áreas de la política relacionadas con la gestión medioambiental.  ¿Acaso no estamos en el momento de la historia en que mayor despliegue informativo existe, más leyes promulgadas y más recursos económicos aportados, en pro de la sostenibilidad medioambiental y, al mismo tiempo, el momento de la historia que a más velocidad se están deteriorando el conjunto de ecosistemas del planeta?

Pudimos ver recientemente en la comarca, cómo se lanzaba una campaña informativa en defensa de la Posidonia oceánica que costaba unos pocos miles de euros al mismo tiempo que se tramitaba una regeneración del litoral – de consecuencias impredecibles para la supervivencia de esta planta- valorada en 14 millones de euros…todo ello avalado por los organismos medioambientales pertinentes.

Pero si queremos comprender la magnitud exacta de estas dinámicas teatrales en materia de conservación del patrimonio natural, nada como la historia de Joan.

Joan, un árbol presente y estimado.

Joan es el nombre con el que bautizaron a un árbol magnífico ubicado en el patio del colegio Les Vessanes. Este ejemplar de chopo aparece recogido como árbol singular de interés local en el “Catálogo de árboles y arboledas monumentales y singulares de interés local de Denia”, con un Coeficiente de Monumentalidad Notable, y contemplándose por todo ello unos criterios de protección. Dicho lisa y llanamente, es un árbol protegido en suelo público, para el cual se establece un perímetro de protección de 27 metros alrededor de su tronco.

En el momento en que Joan es declarado ejemplar protegido, parte de la superficie que alberga sus raíces ya está hormigonada y destinada a zona de juegos, así que en sucesivas reuniones mantenidas en el Consell Assessor del Arbrat -otro espectáculo teatral cuya finalidad básica es justificar la eliminación de árboles- se sugiere, aunque no se recoge en acta, que podría ser bueno para la salud de Joan taladrar toda esa superficie para favorecer el aporte de humedad a esa zona. Nunca se llegó a realizar.

Tiempo después, y ante la necesidad de un aulario de infantil en el colegio Pou de la Muntanya, se decide que el lugar idóneo para su construcción es…¡¡¡a apenas 4 metros de Joan!!!, en lugar de los 27 metros que establece la ficha de protección.

Joan antes (a la izquierda) y después.

Con todo ello, se puede intuir una grave afección de esas obras en el sistema radicular del árbol, pero no contentos con ello y puestos a cumplir todos y cada uno de los puntos del decálogo “10 maneras de acabar con un árbol”, realizan un relleno de la base del tronco de más de medio metro de altura para asegurarse de que la podredumbre en esta zona cumpla su siniestra función. Recordemos que la única parte de un árbol habilitada para estar bajo tierra son sus raíces y es difícil de comprender, desde el conocimiento, que una premisa tan básica haya sido vulnerada.

Y ya finalizando, recordar que Joan es un árbol de hoja caduca -ojo con el detalle- y que una de sus ramas principales sobrevuela ampliamente la cubierta del aulario, la cual imagino dotada de los correspondientes desagües. Me aventuro a pronosticar una futura intervención en esa rama para paliar los problemas de humedades y goteras derivadas de las múltiples obstrucciones…y esto, al tiempo.

¿Y cómo afectaría esto al porvenir inmediato de Joan? Bueno, a Joan se le protege por que cumple unos de los requisitos imprescindibles, que es superar los 25 metros de diámetro en la copa (según el artículo 4 de la Ley 4/2006. Del 19 de Mayo, de la Generalitat) y podría ser -digo, podría ser- que eliminar esa rama en un futuro podría dejarlo fuera del “Catálogo de árboles y arboledas monumentales y singulares de interés local de Denia” allanando así el camino a un posible adiós definitivo.

Cronograma visual del desaguisado.

Joan es un árbol protegido en suelo público, y no solo no se ha implementado ninguna acción que repercuta en la mejora de sus condiciones si no que, por el contrario, se han llevado a cabo toda una serie de intervenciones dirigidas a poner en serio peligro su vida, dicho lo cual se plantean las siguientes interrogantes: si se le está haciendo esto a Joan impunemente, a la vista de todo el mundo y con el beneplácito de todas las autoridades..¿qué futuro les deparará al resto de árboles del Catálogo? ¿Qué podemos esperar que le ocurra al ficus de la Mistelera o al algarrobo de la Venta de la Posa, por poner un ejemplo? ¿se contempla acaso una partida presupuestaria que cubra estas necesidades?....En definitiva ¿de qué sirve el Catálogo entonces?